Allí estudió durante siete años y acabó la carrera de Magisterio.
Más tarde se interesó por las óperas wagnerianas y marcha a Bayreuth para aprender repertorio.
Fijó su residencia definitiva en Milán, donde se casó con la soprano italiana Olimpia Brossio, con la que tuvo tres hijos: Carlos, que muere a corta edad, Vally y Mauricia.
La prensa madrileña se hace eco de este evento en la siguiente forma:
En 1901 se presentó como empresario y cantante en el Teatro Principal de Zaragoza.
Cuando su vida artística se lo permite, visita a sus familiares, que viven en Huesca.
Su última actuación fue en Italia, en el Teatro Grande di Brescia, cantando la misma ópera con la que había iniciado su carrera: Les huguenots.
Los últimos años de su vida los dedica a promocionar cantantes nuevos y espectáculos líricos.
A estos títulos hay que añadir el Meus amores de Odeón, canción gallega compuesta por José Baldomir y la canción «Kirie Eleison» de la zarzuela Las Aparecidas, de Manuel Fernández Caballero, pasada a cinta magnetofónica y perteneciente al archivo del citado musicólogo.