En ese período obtuvo seis títulos, consagrándose además como goleador del Campeonato Peruano de Fútbol en siete ocasiones.
[25] El reconocimiento logrado en años anteriores hizo que sea invitado a algunos programas de televisión en donde se le realizó diversos homenajes.
A su sepelio asistieron personalidades de todas las edades, entre hinchas y aficionados del fútbol.
[28] Su ataúd fue cubierto con una bandera de Universitario, además el féretro se paseó por la cancha del Estadio Lolo Fernández, simulando una última vuelta olímpica.
[28] Al salir del estadio y yendo rumbo al cementerio, se intentó poner el féretro en la carroza pero la cantidad de personas obligó que sus restos fueran llevados a pie hasta la avenida Alfonso Ugarte.
[11] Debido a sus grandes actuaciones como zaguero, Arturo fue contratado por Universitario de Deportes.
[3] En marzo de 1930, vistió la casaquilla crema por vez primera, inicialmente entró en la reserva y a finales de ese mismo año fue el goleador absoluto del torneo por lo que fue promovido al primer equipo.
[31][32] En el torneo amateur de 1932, la «U» obtuvo el subcampeonato con cinco victorias y dos empates.
[16] Al año siguiente se repitió la historia, Universitario obtuvo el subcampeonato y Teodoro fue el goleador de la liga con nueve anotaciones.
Los otros equipos sólo disputaron dos encuentros y no siguieron haciéndolo, ya que al haber ganado los rosados en todas sus presentaciones, se coronó campeón nacional; Universitario finalizó en el tercer lugar con tres puntos.
Un año después la «U» entrenada por el inglés Jack Greenwell, logró el tercer título de su historia deportiva.
En 1946, por primera vez el campeonato se disputó mediante el formato de tres rondas.
Al final del partido dio la vuelta olímpica y hasta fue saludado por sus adversarios.
Pero los de Hualcará, rindiéndole un homenaje a Lolo, convirtieron dos tantos y ganaron el encuentro.
En el segundo partido se enfrentaron Universitario y Centro Iqueño, aunque Teodoro sólo se mantuvo en el campo durante los primeros seis minutos, ya que en ese justo momento el locutor del estadio anunció la despedida definitiva del Cañonero.
[49] Sin embargo, Austria protestó ante la FIFA y se ordenó disputar un partido de revancha sin espectadores, situación ante la cual el gobierno peruano decidió que toda la delegación nacional abandonara el evento deportivo,[50] dando como ganadores del encuentro a los austriacos.
[55] Durante la década de 1940, Fernández participó con la selección peruana en tres ediciones más del Campeonato Sudamericano.
La primera de ellas en el Campeonato Sudamericano 1941 realizado en Chile, donde disputó cuatro encuentros y marcó tres anotaciones.
[56] La segunda en el Campeonato Sudamericano 1942 de Uruguay llegando a anotar dos goles en tres partidos.
[58] Teodoro Fernández recibió diversos homenajes tanto en vida como después de su fallecimiento.
[5] El compositor peruano Lorenzo Humberto Sotomayor le dedicó la polca Lolo Fernández,[59] otro tema en su honor es la polca El Taita Lolo Fernández con música de Alcides Carreño y letra de Fernando Soria.
[71] A pesar de haber permanecido durante toda su carrera en Universitario, reforzó varios equipos para disputar partidos amistosos.
En los años 1930, Lolo junto con otros futbolistas de la «U» como Orestes Jordán, Vicente Arce, Carlos Tovar y Arturo Fernández reforzaron a Alianza Lima para representar al Perú en una gira que realizaron en Chile.
[23][74] Lolo Fernández es el futbolista peruano del que más libros se han escrito.