La palabra "China" se utiliza en los idiomas occidentales de origen europeo desde el siglo XVI.
China estuvo por siglos dividida en pequeños feudos y reinos, lo cual explica la gran diversidad lingüística que hay en dicho país.
Durante la dinastía Zhou (1046-256 a. C.), la poca autoridad que ejercía el rey (王; Wáng) desapareció por completo, dando paso al periodo de primaveras y otoños y, posteriormente, de los reinos combatientes.
Ying Zheng pasaría a la historia con el nombre de Qin Shi Huang.
Pese a todas estas reformas, quizás, la más significativa fue la unificación de la escritura.
Los Qin desaparecieron en el año 206 a. C. y fueron sustituidos por la dinastía Han, que gobernó durante cuatro siglos (más que cualquier otra dinastía) e hicieron del confucianismo la ideología oficialmente del Estado.
La breve dinastía Sui fue reemplazada por la dinastía Tang, que gobernó prósperamente durante tres siglos y condujo a China a una nueva era de riqueza y estabilidad no vista desde el periodo Han.
Esta vio grandes avances tecnológicos, económicos y culturales, tales como el surgimiento del neoconfucianismo.