Iglesia católica bizantina en Italia
La Iglesia carece de un jerarca que la presida y se divide en Italia en dos ramas independientes entre sí aunque relacionadas por sínodos extraordinarios.[6] La eparquía de Piana comprende al rito bizantino en toda Sicilia y además 4 sectores separados (418 km²) en los cuales el eparca tiene jurisdicción territorial exclusiva incluso sobre los fieles de rito latino.Los fieles bizantinos de Palermo conforman una parroquia personal en la concatedral San Nicolò dei Greci alla Martorana.Los tres circunscripciones eclesiásticas están inmediatamente sujetas a la Congregación para las Iglesias Orientales de la Santa Sede.El monasticismo griego recibió un fuerte impulso en Italia luego de que los musulmanes del Califato ortodoxo invadieron Siria y Egipto, y luego por las disputas iconoclastas en el Imperio bizantino.Los monjes griegos del sur de Italia retuvieron su rito, mientras que la invasión lombarda cortó sus comunicaciones con la Iglesia latina.Esta orden recibió oposición en algunas diócesis, tales como Bari, Casano, y Tarento, que lograron mantener el rito latino, lo mismo que Trani en donde en 983 se le permitió en premio a la ayuda del obispo en la captura de la ciudad por los griegos.En Reggio Calabria, Count Ruggiero en 1092 dio a los griegos la iglesia S. Maria della Cattolica, que tenía un protopapa exento de la jurisdicción del obispo hasta 1611.En 1695 esta diócesis tenía 59 sacerdotes griegos, y 30 años después solo quedaba uno.En Sicilia la latinización fue más fácil y radical, ya que durante la ocupación musulmana la mayoría de sus diócesis quedaron sin obispo, por lo que la instalación de los obispos latinos no encontró dificultades.[14] Importantes colonias griegas, fundadas principalmente por razones comerciales, fueron localizadas en Venecia, Ancona (en donde los papas Clemente VII y Paulo III cedieron a los griegos las iglesia de S. Anna, que perdieron en 1833, y fue declarada cismática en 1797), Bari, Lecce (en donde hasta el siglo XIX en la iglesia S. Nicola el culto fue realizado en lengua griega y rito latino), Nápoles (en donde tenían la iglesia SS. Pietro e Paolo, erigida en 1526 por Tommaso Paleólogo Assagni), Livorno (en donde tenían la iglesia de la Annunziata hasta 1607).En 1595 el papa Clemente VIII promulgó una instrucción para guiar a los obispos de rito latino que tuvieran católicos griegos en sus diócesis y el papa Benedicto XIV revisó estas instrucciones completamente en 1742, proveyendo a los ítalo-griegos y a los ítalo-albaneses con un pequeño código de leyes canónicas.En Firmo el seminario de SS. Pietro e Paolo existió desde 1663, erigido por la Propaganda Fide para suministrar sacerdotes a Albania, pero fue suprimido en 1746.En 1794 fue transferido a San Demetrio Corone, en el antiguo monasterio basiliano de S. Adriano.Hasta 1919 los ítalo-griegos estaban sujetos a la jurisdicción de obispos diocesanos latinos.Sin embargo, los papas nombraban un arzobispo titular residente en Roma para la ordenación de sus sacerdotes.