Su papel en La ciénaga (2001) le valió el Premio a la Mejor Actriz en el Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano de La Habana.
Según contó la misma Borges, sus compañeras se reían de aquella niña con un aspecto tan frágil y una voz tan imponente, y se rieron tanto que Graciela dejó de hablar.
[3][4][5]Era el año 1958 y la cultura aún juzgaba fuertemente al oficio de la actuación femenina.
En sus comienzos recibió la oferta de Carlo Ponti para filmar en Europa, propuesta que nunca se concretó.
Además trabajó con otros directores como Leonardo Favio, Manuel Antín, Mario Soffici, Lucas Demare, Fernando Ayala, Luis Saslavsky, Alejandro Doria, Ricardo Wullicher, Javier Torre, Lucrecia Martel, Luis Ortega, Daniel Burman y Juan José Campanella.
En televisión se destacó en Tres destinos, dirigida por María Herminia Avellaneda en 1966, y por su trabajo en Alta comedia; su participación en teatro ha sido mínima, recordándosela en Cartas de amor, y con Nito Artaza.
[9][10] En 1972, viajó a los Estados Unidos invitada por el agregado cultural de la embajada.
El quinto día su anfitrión la llevó a la casa de Frank Sinatra en donde este último entró al comedor con su bata, la saludó, le preguntó por la Argentina y elogió la belleza de la mujer latina.
En febrero de 2022, Borges anunció en una entrevista que finalmente se retira del cine.