Escena poscréditos

El recurso de la escena poscréditos fue usado por primera vez en 1966[1]​ al finalizar los créditos de la película Los silenciadores, con una breve escena que sirvió para introducir la siguiente parte, Matt Helm, agente muy especial.

Un ejemplo de esto es la saga cinematográfica de Piratas del Caribe, que empezó a incluir dichas escenas en su primera parte, Pirates of the Caribbean: The Curse of the Black Pearl,[2]​ mostrando detalles importantes sobre el destino del protagonista para la siguiente parte, recurso que se vería añadido en todas las demás partes.

Si bien muchos de los directores optan usar ese recurso para dar pistas sobre las secuelas que tienen previstas, a lo largo de la historia moderna del cine también se ha usado con otros fines, como humorístico, para conmemorar algún fallecido o mostrar escenas reales en el caso de películas que fueron basadas en hechos reales, qué sucedió con algún personaje o hasta rompiendo la cuarta pared para dirigirse al público que está mirando la obra.

Luego, sin darse cuenta, tira su antena de recepción junto con los neumáticos que caen del techo de su choza y el FaceTime en su iPad se apaga, para su consternación.

En los videojuegos, al tener una mayor capacidad de interacción, existen muchos más recursos para usarse como escenas poscréditos, ya sea con el mismo objetivo que en las películas como hacer reír o saber qué pasa con cierto personaje después de llegar al final del contendido, u otros diferentes, como jugar un poco más al final, bien sea con un juego pequeño extra o una decisión a tomar, interactuar con las propias letras de los créditos o con escenas que hacen volver al usuario al inicio de la aventura, entre otros.