[11] Séneca registra una inscripción en la puerta del Jardín en la epístola XXI de las Cartas a Lucilio: «Extraño, tu tiempo será agradable aquí.
Otros epicúreos conocidos fueron Metrodoro, Leontion, Colotes, Poliano, Apolodoro, Zenón Sidonio, Demetrio, Orión, Fedro y Patrón.
[26] Eikas (en griego: εἰκἰ, del εἴκοσῐ eíkosi, "veinte"), Eikadenfest [34] es una fiesta celebrada entre los epicúreos en conmemoración de Epicuro y Metrodoro.
[31] Esto se aprecia mejor en los intentos de compatibilizarlo con las enseñanzas cristianas tras la recuperación del pensamiento Epicuro durante la Edad Moderna.
[62] Los individuos no actuarían injustamente, incluso si el acto pasara desapercibido inicialmente, debido a la posibilidad de ser capturados y castigados.
[77][93] El epicureísmo afirma que los átomos no se pueden dividir en partes más pequeñas, y los epicúreos ofrecieron múltiples argumentos para apoyar esta posición.
Esto plantea el problema sobre si los átomos pueden dividirse tener partes, como lo demuestran sus variaciones de forma.
A. Long y David Sedley sostienen que para Epicuro «los objetos sin partes solo pueden moverse incidentalmente al movimiento de un cuerpo más grande, por ejemplo el átomo».
[75] Contra el platonismo, Epicuro enfatizó la filosofía natural en lugar de la especulación por la razón sin evidencia empírica.
[214] En las Sentencias vaticanas se añade: Al igual que Aristipo y los cirenaicos, el epicureísmo basa su ética en un conjunto de valores hedonistas.
[247] Concluye como placeres fundamentales la ausencia de perturbación en el alma (ataraxía) y la ausencia de dolor físico (aponía), pues estos son placeres estables; en cambio, "la alegría (khára) y la fruición (euphrosíne) se miran conforme al movimiento en su actividad (katà kínesin energeía)".
[262][263] Se cree que la opinión acerca del matrimonio en Epicuro es positiva y consideró las relaciones sexuales como naturales pero innecesarias.
[285] Luego, temer a la muerte en vida es absurdo porque "aquello cuya presencia no nos atribula, al esperarlo nos hace sufrir en vano".
El comediógrafo Menandro, amigo de Epicuro, representó en su obra la Rapada la forma en que se maltrataban a las heteras.
[311][312] En contraste con las tradiciones filosóficas estoicas, platónicas y aristotélicas,[313] los epicúreos mostraron poco interés en participar en la política de la época, ya que hacerlo genera problemas.
[317][318] Plutarco elaboró sobre este tema en su ensayo Ei kalôs eírêtai tò láthê biôsas (en latín: An rectum dictum sit latenter esse vivendum) en su obra Moralia;[319][320] (cf.
[313] En lo que respecta a la organización epicúrea, Georg Lukács hace su valor para ver cómo un grupo media la teoría y la práctica.
[328] Lucrecio siguió a Empédocles en De rerum natura, donde propuso un mecanismo evolutivo predarwiniano sin ninguna intervención sobrenatural.
[329][330][331] Toda la historia de la civilización, según Lucrecio, puede leerse como el vano intento manejar nuestros deseos para poder disfrutarlos mejor porque con cada avance se reemplazarla un dolor por otro.
[345] Platón expresó en el Mito de Er su visión del inframundo, donde las almas eran castigadas o premiadas por sus acciones en vida.
Los dioses son proyecciones imaginativas (phantastikás) del pensamiento, que no podían ser comprobadas por las sensaciones (como los átomos).
Si bien aún no se ha alcanzado un consenso académico, la posición realista sigue siendo el punto de vista predominante en este momento.
Los epicúreos rechazaban la antropocéntrica teleología de los estoicos, así como la teodicea frente al mal que el universo aflige a la vida humana.
Los epicúreos Lucio Manlio Torcuato y Gayo Valerio Triario le expresaron a Cicerón su admiración por el filósofo:[382] La persona en difundir sus doctrinas en prosa latina fue un cierto .
[394] El filósofo escéptico posterior Sexto Empírico rechazó las enseñanzas de los epicúreos específicamente porque los consideraba como "dogmaticistas" teológicos.
Incluso, se encuentran resonancias —o solo menciones— del epicureísmo, en autores ya más contemporáneos como Jeremy Bentham, John Stuart Mill, Auguste Comte, Friedrich Hegel, Marx y Nietzsche.
[55][371] Los Humanistas de Quattrocento no respaldaron con claridad el epicureísmo, pero eruditos como Francesco Zabarella (1360–1417), Francesco Filelfo (1398–1481), Cristoforo Landino (1424–1498) y Leonardo Bruni ( c. 1370–1444) le dieron al Epicureísmo un análisis más justo que el que había recibido tradicionalmente y proporcionó una evaluación menos abiertamente hostil del mismo Epicuro.
[371][421] Thomas Hobbes, un amigo de Gassendi, retomó la teoría del placer y la interpretó en un sentido más cercano a la doctrina cirenaica.
[433] Por otro lado, Hegel (1770 - 1831) presentó los postulados metafísicos del atomismo epicúreo en Lecciones sobre la filosofía de la historia universal desfavorablemente.
[439][440] Marx veía a Epicuro como un empirista dogmático, cuya visión del mundo es internamente consistente y prácticamente aplicable.
Hemos nacido una vez y no puede haber un segundo nacimiento. Por toda la eternidad nunca mas seremos. Pero tu, aunque no eres señor del mañana, pospones tu felicidad. Desperdiciamos nuestras vidas retrasando las cosas, y cada uno de nosotros muere sin haber realmente vivido. [ 288 ]