La novela Crimen y castigo está dividida en seis partes más el epílogo.
Los episodios clave se distribuyen primero en una mitad y luego de nuevo en la otra.
Dostoievski emplea juegos de palabras en Crimen y castigo, jugando especialmente con la polisemia.
Así que tiene la idea de matar y robar a Aliona Ivánovna, la vieja usurera.
Esa idea le atormenta durante días, y crece en su interior como una semilla.
El libro está dividido en partes, cada una con un diferente propósito, a continuación, un breve resumen de cada una: Antes de describir a los personajes, es importante señalar que estos son un aspecto que atrae del libro, pues Dostoyevski no buscaba encajar a sus personajes en una categoría de bueno o malo, sino que tal como los seres humanos, estos tenían personalidades complejas.
Así, cada personaje puede ser rechazado por la sociedad, pero aceptado por el público, o viceversa.
Raskólnikov produce él mismo sus sufrimientos matando a la prestamista y viviendo en condiciones tan precarias cuando podría conseguir un empleo.
La novela hace alusiones bíblicas, en concreto a historias del Nuevo Testamento, como la de Lázaro, cuya muerte y resurrección pueden verse como paralelas a la muerte y resurrección espiritual de Raskólnikov.