Tras estudiar Arte Dramático debuta en teatro con la obra La fierecilla domada, que protagonizan Fernando Fernán Gómez y Analía Gadé.
Poco después, se inicia en el cine con Vuelve San Valentín (1962), de Fernando Palacios.
Seguirían títulos como La gran familia (1962) o La niña de luto (1963), de Manuel Summers, que la convierte en una relevante promesa del cine español del momento.
En los años siguientes desarrolla su labor como actriz en cine, teatro y televisión.
También intervino en la película de TV La gran familia... 30 años después.