Del antiguo castillo medieval pervive el topónimo –calle del Castillo-: los escasos restos materiales que quedan se hallan en la cima de un tormo (peñasco aislado) situado al norte de la población y que da nombre a la misma.
Villel y sus aldeas, sin embargo, se hallaban por este mismo tiempo bajo la jurisdicción de la Orden Militar del Temple.
[9] Geológicamente, el tormo está formado por materiales del Dogger del Jurásico medio: calizas tableadas (en la base), calcoarenitas (en la parte media-superior) y nuevos paquetes de calizas tableadas (en la cima).
Resulta razonable pensar que sobre esta superficie (unos 900 m² descontado el tormo) se ubicara la primitiva aldea de Tormón: el resto del caserío se situaría en la ladera suroriental, ocupando lo que hoy son las calles Castillo y del Río.
No obstante el realismo del dibujo, resulta improbable que en dicha fecha se conservara una estructura semejante.
El emblema contiene tres elementos integrados en el paisaje que representa: el tormo, la torre y el puente sobre el Ebrón.