La cartografía de la variación en una zona es valiosa para detectar estructuras ocultas por el material suprayacente.
Existen tres tipos principales de magnetómetros utilizados para medir anomalías magnéticas.
[3]:75[4] Mide la componente a lo largo de un eje concreto del sensor, por lo que necesita estar orientado.
La elevación del magnetómetro reduce la influencia de los pequeños objetos ferrosos desechados por el hombre.
Para reducir aún más las señales no deseadas, los topógrafos no llevan objetos metálicos como llaves, cuchillos o brújulas, y se evitan objetos como vehículos de motor, vías de ferrocarril y alambradas.
La principal aplicación de las prospecciones terrestres es la búsqueda detallada de minerales[2]:16 Los estudios magnéticos aerotransportados se utilizan a menudo en prospecciones petrolíferas para obtener información preliminar para los estudios sísmicos.
En algunos países, como Canadá, las agencias gubernamentales han realizado estudios sistemáticos de grandes zonas.
Estos recorridos se cruzan ocasionalmente con líneas de enlace, perpendiculares a la prospección principal, para detectar errores.
[3]:72 Además, las tormentas magnéticas pueden tener magnitudes pico de 1000 nT y pueden durar varios días.
Se trata de un modelo matemático a gran escala y promediado en el tiempo del campo terrestre basado en mediciones de satélites, observatorios magnéticos y otros estudios[2]:167 Algunas correcciones necesarias para las anomalías gravitatorias son menos importantes para las anomalías magnéticas.
Esta remanencia puede durar millones de años, por lo que puede estar en una dirección completamente distinta a la del campo terrestre actual.