[2] No está totalmente personificada en las épicas homéricas, cuyo nombre se utiliza como metonimia por el mar:[3] Comparte el epíteto homérico Halosidne («nutrida de mar»)[4][5] con Tetis:[6][7] en cierto sentido las ninfas marinas son dobles.
[8] Apolodoro, en cambio, la describe como hija de Océano y Tetis, y por lo tanto es una de las oceánides —es el único autor en darle esta ascendencia—;[9] no obstante más adelante ya la incluye entre las nereidas, como estamos acostumbrados.
[16] En un fragmento anónimo se dice de Anfitrita que las doncellas nereidas fueron alumbradas por ella.
[19] Aunque Anfitrite no aparece en el culto griego, sí fue importante en una etapa arcaica, pues el himno homérico a Apolo Delio cuenta que en el nacimiento de Apolo estaban «todas las diosas principales, Dione y Rea e Icnea y Temis y la que gime en alto Anfitrite.
Mientras erraba por las islas de Atlante se tropezó con ella, le transmitió la noticia y la condujo ante Poseidón.
Su figura fue recuperada por la poeta española Aurora Luque, quien en su poemario Gavieras le dedica el poema "Anfitrite" en el que cuestiona especialmente que haya sido dejada de lado, poco nombrada y representada.