Sobreviven nueve manuscritos en total o parcialmente, aunque no todos tienen el mismo valor histórico y ninguno de ellos es la versión original.
[1] La Crónica no es imparcial: hay ocasiones en que la comparación con otras fuentes medievales deja en claro que los escribas omitieron eventos o contaron versiones unilaterales de eventos históricos; también hay lugares donde las diferentes versiones se contradicen entre sí.
Sin embargo, en su conjunto, la Crónica es la fuente histórica más importante para el período en Inglaterra entre la partida de los romanos y las décadas posteriores a la conquista normanda.
Gran parte de la información dada en la Crónica no se registró en ningún otro lado.
[3][4][a] El historiador Frank Stenton argumentó, a partir de evidencia interna, que primero fue compilado para un secular, pero no real, y que «su origen está en uno de los condados del sudoeste ... en algún punto no muy lejos del límite entre Somerset y Dorset».
[19] Después de esta convención, los dos manuscritos adicionales generalmente se llaman [H] y [I].
[28] La Crónica de Abingdon I fue escrita por un solo escriba en la segunda mitad del siglo X.
[B] estuvo en Abingdon a mediados del siglo XI, porque se usó en la composición de [C].
[34] Se pueden identificar cinco escribas diferentes para las entradas hasta 1054, después de las que parecen haber sido elaboradas a intervalos.
Se cree que algunas de las entradas pudieron haber sido compuestas por el arzobispo Wulfstan.
[38] El escriba agregó material relacionado con la abadía de Peterborough, que no está en otras versiones.
El mismo escriba luego continuó los anales hasta 1131; estas entradas se hicieron a intervalos y, por tanto, son presumiblemente registros contemporáneos.
El manuscrito tiene muchas anotaciones e interlineaciones, algunas hechas por el escriba original y otras por subsiguientes,[45] como Robert Talbot.
Este manuscrito fue destruido casi por completo en el incendio de 1731 en Ashburnham House, donde se encontraba la Biblioteca Cotton.
[47] Sin embargo, Laurence Nowell, anticuario del siglo XVI, hizo una transcripción que Abraham Wheelocke utilizó en una edición de la Crónica impresa en 1643.
La introducción original de [A²] se eliminó más tarde antes del incendio y sobrevive como British Library Add MS 34652, f.
Angliae Saxonica en sus obsequios, pero el manuscrito que incorporaba esto, catalogado actualmente como Cambridge University Library MS.
Sin embargo, el nombre «Wight» deriva del latín Vectis, no de Wihtgar.
[61][62] Algunas veces se pueden ver los prejuicios de los escribas al compararse diferentes versiones del manuscrito que crearon.
Esta vez solo [D] tiene algo que decir: «En este punto el conde Ælfgar fue expulsado, pero pronto regresó nuevamente, con violencia, con la ayuda de Gruffydd.
[63] En este caso existen otras fuentes para aclarar el relato: se hizo un gran ataque noruego en Inglaterra, pero [E] no dice nada y [D] apenas lo menciona.
[24] Los Anales de Waverley emplearon un manuscrito similar a [E], aunque parece que no contenía las historias centradas en Peterborough.
El manuscrito de la crónica traducida por Geoffrey Gaimar no puede identificarse con precisión, aunque según la historiadora Dorothy Whitelock era «un texto bastante mejor que “E” o “F”».
Titulada Chronicon Saxonicum, dispuso el texto en inglés antiguo en columnas paralelas con la correspondiente versión latina de Gibson y se convirtió una publicación estándar hasta el siglo XIX.
[73] Una edición facsímil de [A], The Parker Chronicle and Laws, fue publicada en 1941 por la Oxford University Press, editada por Robin Flower y Hugh Smith.
[72] La editorial D. S. Brewer anunció en 1981 un proyecto titulado The Anglo-Saxon Chronicle: a collaborative edition en 1981.
[74] El manuscrito [C] fue editado por H. A. Rositzke como The C-text of the Old English chronicles, en Beiträge zur Englischen Philologie de 1940;[72] el volumen de la edición colaborativa salió a la venta en 2000, editado por Katherine O'Brien O'Keeffe.
Una edición académica del manuscrito [D] se encuentra en An Anglo-Saxon Chronicle from British Museum Cotton MS., Tiberius B. iv (1926), editado por E. Classen y F. E.
[72] Geoffrey Cubbin también editó el manuscrito [D], que fue publicado como el volumen VI de la edición colaborativa en 1996.
[74] Rositzke también publicó una traducción del texto [E] en The Peterborough Chronicle (1951); la edición de Susan Irvine fue incluida en la serie colaborativa en 2002.