[cita requerida] Alexander Humboldt llamó a la zona intertropical americana las regiones equinocciales del Nuevo Mundo, por estar situadas en las áreas donde, por estar en las bajas latitudes el día y la noche duran casi lo mismo (alrededor de las 12 horas, de equi, prefijo griego que significa igual y noccio noche).Dentro de la zona intertropical, es la lluvia y no la temperatura, el elemento climático que presenta mayor variabilidad anual.De hecho, como los climas isotermos no presentan verdaderas estaciones térmicas a lo largo del año, es la diferente pluviosidad tanto en el espacio como en el tiempo, la que da origen a distintos tipos climáticos intertropicales.En síntesis, la característica climática más importante de la zona intertropical es su extraordinaria estabilidad a lo largo del tiempo, como lo demuestra la presencia en la actualidad de helechos arborescentes, plantas muy primitivas que no han sufrido cambios evolutivos importantes desde la Era Primaria, tal como puede verse en la imagen.Según la clasificación climática de Köppen, la zona intertropical es la franja en la que se presentan los climas cálidos identificados con la letra A (Temperaturas medias mensuales siempre superiores a los 18 °C), en sus tres variantes (Af, Aw y Am).El concepto de pisos térmicos ha sido estudiado ampliamente por Alejandro de Humboldt, Antonio Goldbrunner, Henri Pittier y en Venezuela, por Eduardo Röhl, Santos Rodulfo Cortés y muchos otros autores.Así pues, como en la zona intertropical las temperaturas medias varían poco a lo largo del año, la altitud se convierte en el factor climático de mayor importancia.De nuevo nos encontramos con una denominación poco apropiada, pero no existe otra que se haya empleado para designar a un piso transicional o intermedio entre los niveles de la tierra caliente y la templada se encontraría entre los 800 y los 1500 m s. n. m. promedio.Se ubica entre los 2200 y los 3000 m s. n. m. Es el nivel ecológico de la papa o patata, en la zona intertropical.Un aprovechamiento importante desde el punto de vista económico que podría extenderse más arriba en altura.Cuando llegan a superar el techo vegetal y se incrementa la función de la fotosíntesis comienzan a crecer estrangulando al árbol sobre el que se habían apoyado (además de que le tapan la luz solar).Pero durante millones de años (desde la Era Primaria, cuando aparecieron las primeras especies vegetales en nuestro planeta) se ha ido acumulando una enorme cantidad de biomasa sobre la superficie terrestre (y también en el subsuelo en forma de hidrocarburos), en la que suele existir una estrecha correspondencia entre producción y consumo que fluctúa a través del tiempo en una búsqueda eterna del equilibrio.Desde luego, ello no significa que se pueda seguir expoliando el medio geográfico (suelos, vegetación, fauna, producción de contaminantes) sin restricciones hasta llegar a situaciones irreversibles.La bebida conocida como Amargo de Angostura, por ejemplo, constituye un ejemplo del desarrollo de un tónico que resultó muy útil desde el siglo XIX ya que, aunque con una composición creada por Johann Gottlieb Benjamin Siegert, y que siempre se guardó en el mayor secreto hasta nuestros días, se sabe que contenía entre sus ingredientes quina (de ahí el sabor amargo) y sarrapia, vegetales cuyos principios medicinales están perfectamente comprobados desde hace más de tres siglos.
El
Nevado Huascarán
con 6768 m s. n. m., ubicado en
Perú
, es el punto culminante de la zona intertropical y la segunda montaña más alejada del centro de la Tierra (después del
Volcán Chimborazo
, en
Ecuador
), si contamos la altura de su cima desde el centro del planeta, debido al abultamiento terrestre en la circunferencia ecuatorial
Los árboles más corpulentos de la zona intertropical suelen tener gruesos contrafuertes para sostener su enorme masa. Ello se debe a que los suelos en la zona intertropical son muy someros, no debido a su pobreza en nutrientes, sino a las intensas lluvias, que van disolviendo y "lavando" las materias vegetales en descomposición, lo que genera este tipo de adaptación de las raíces para aumentar la resistencia del tronco, reforzando así su debilidad por la escasa profundidad del suelo.