Hura crepitans, también llamado catahua, ochoó, jabillo, jabilla, ceiba amarilla, solimán o salvadera es un árbol venenoso para los seres humanos, de la familia de las euforbiáceas.Las hojas ovadas y coriáceas alcanzan los 60 cm de ancho.[cita requerida] Su látex tóxico afecta a los peces adormeciéndolos, por lo que se utiliza para atraparlos.[6] La madera, llamada "hura" se utiliza para trabajos menores de construcción.[3] Hura crepitans fue descrita por Carlos Linneo y publicado en Species Plantarum 2: 1808.
Tronco de un jabillo de gran tamaño que ha ocupado toda la acera en una calle de Caracas, Venezuela, levantando tanto la acera como la calle y obligando a los vecinos a cortar las púas alrededor del mismo.
Detalle de la hoja. Se aprecian las glándulas apicales sobre el
peciolo
y el
indumento
de la lámina.