[10] El orónimo sierra de Cantabria tuvo un origen académico y exógeno.
[cita requerida] El cartógrafo militar Francisco Coello usó la denominación Cordillera de Cantabria, pero tan solo aplicada a la vertiente norte del área centro-oriental de la sierra.
La denominación «Sierra de Toloño» es la que debe utilizarse en la cartografía oficial producida por las administraciones públicas integradas en el Sistema Cartográfico Nacional (la del Estado, en todo caso, y las de las tres CC. AA. interesadas.
Morfológicamente hay que destacar el desarrollo de varios niveles de glacis y terrazas asociados al río Ebro, que en este sector presenta un curso formando meandros bastante pronunciados.
[35] En la era Cenozoica en la época del Oligoceno y Mioceno los sistemas lacustres han dejado constancia es estos lugares.
En la ladera meridional se ha origina un relieve suave y ondulado, orientado hacia el sur o sur-suroeste.
Los suelos, de composición arcilloso-calcárea, pobres en materia orgánica, nutrientes y sales minerales.
La vía Sartara, que asciende por la cara sur del macizo de La Rasa, es un clásico pocas veces repetido.
El efecto de pantalla pluviométrica provoca que las precipitaciones en la Sonsierra sean mucho menores y determinen los contrastes paisajísticos.
Así pues la zona muestra características del clima mediterráneo, continental y atlántico.
Las precipitaciones, que se producen principalmente en primavera y otoño, oscilan entre los 400 l x m² anuales en las proximidades del Ebro y los 900 l x m² en las zonas de mayor altitud.
Por tanto todos pertenecen a la cuenca del Ebro en su margen izquierda.
Hacia el este está Arroyo Hondo que discurre al lado de Ábalos.
Este último desemboca en Baños de Ebro al igual que el Río Salado.
En Lapuebla de Labarca desemboca el Barranco del Valle que antes pasa por Laguardia.
Antes se ha señalado cómo influye en el clima y la pluviometría de esta extensa área geográfica.
[78] Predominan los madroñales en contacto directo con hayedos pobres; es frecuente la gayuba (Arctossaphykis uvaursi) que cubre laderas muy pendientes y sometidas a la erosión.
También hay bosque caducifolio en las áreas más elevadas pero menos frondoso que en la ladera septentrional.
Según se va descendiendo empieza una vegetación de tipo mediterráneo constituida por quejigales y carrascales, al aumentar la aridez climática, el carrascal se presenta con abundante coscoja.
[79] En los terrenos más estables y secos, hasta una altitud de 900 metros, se hallan comunidades dominadas por un carrascal seco de encina carrasca ( ilex rotundifolia) con boj (Buxus sempervirens).
En las zonas más frescas y encajonadas se observan quejigales (Quercus faginea).
[80] También aparecen algunas masas espontáneas y relictas de pino carrasco (Pinus halepensis).
[83] Estos escarpados montes son el hábitat de muchas rapaces como el alimoche, halcón peregrino, águila real, buitre leonado, águila perdicera y búho real.
En el yacimiento de Peña Parda (Laguardia) los resultados obtenidos en las investigación desarrollada han aportado interesantes datos sobre el paisaje vegetal existente en la ladera sur durante la Edad del Bronce.
Sirva como introductorio el siguiente texto: También se aprovecharon los bosques para hacer carbón vegetal.
Como todavía en la actualidad se puede apreciar por los restos dejados por esta actividad en el pasado.
Y también contó con dos neveras, una de ellas junto al Santuario del Toloño.
En 1835, durante la primera guerra carlista, sufrió un incendio que dejó en pie únicamente una parte de la capilla barroca.
[89] Relativamente próxima a esta área geográfica en la actualidad se dan vides silvestres de modo natural.
[91] En la actualidad se utiliza el orónimo sierra de Cantabria aplicado a la enología.