Tercera batalla de la carretera de La Coruña

[1]​ Los sublevados organizaron un importante ejército, llamado División Reforzada de Madrid, que contaba con tanques italianos, baterías antitanque para contrarrestar los T-26 soviéticos y artillería pesada.

Para la operación el general Orgaz cuenta con cuatro columnas mandadas por Sáenz de Buruaga, Asensio, Barrón e Iruretagoyena.[6]​[n.

[8]​ A diferencia de los ataques anteriores, esta vez los rebeldes contaban con numerosas fuerzas para llegar hasta la carretera y cortarla.

[13]​ "La línea que han alcanzado las fuerzas de Orgaz les permite hacer, ahora, el temido giro, el cambio de orientación, en la dirección oeste-este que intentó Varela en las dos ofensivas anteriores.

(...) La situación puede definirse en pocas palabras: el frente está a punto de derrumbarse.

Desde el 15 de noviembre no se vivía en Madrid una situación tan comprometida".

(...) ¿Por qué no ha seguido Orgaz la ofensiva hacia el puente de San Fernando [sobre el río Manzanares] que le habría permitido entrar en la capital [Cuesta de las Perdices abajo]?

[17]​ Se lucha en Majadahonda y en Las Rozas de Madrid, pero la niebla se espesa y algunas unidades pierden el contacto con el resto (una pasará dos días enteros deambulando por la sierra).

[18]​ La batalla continuó hasta el 15 de enero, día en que ambos bandos empezaron a fortificar sus posiciones.

Otros autores reducen a la mitad esa cifra: 6.000 bajas republicanas (500 muertos) y 1.500 de los sublevados.

[21]​ El último intento de envolver Madrid fue una iniciativa del "Corpo di Truppe Volontarie" (CTV) fascista italiano, a la que accedió el "Generalísimo" Franco, y que dio lugar a la batalla de Guadalajara.

La idea italiana de la ofensiva era atacar Madrid desde el noreste dirigiéndose a Guadalajara y una vez tomada esta ciudad cortar la carretera de Valencia y entrar en la capital.

Carro soviético T-26 usado por las fuerzas republicanas.