Puerta de Hierro (Madrid)

La citada tapia tenía como misión impedir el furtivismo y evitar que los animales salvajes del coto escapasen.

La construcción de la puerta se encomendó al arquitecto Francisco Moradillo quien contó con la colaboración del escultor Juan Domingo Olivieri y del rejero Francisco Barranco.

Sin embargo, en 1752, dimite Olivieri tras haber surgido diversos problemas con Juan González, persona con la que se había subcontratado la cantería, haciéndose cargo entonces de su continuación el propio Moradillo.

Una verja de hierro forjado une los diferentes elementos arquitectónicos.

Decorada con ornamentos militares y de caza en bajorrelieves localizados en los contrafuertes, sobre el frontón se alza entre banderas el escudo real, flanqueado por dos esfinges recostadas, obras llevadas a cabo por Juan Domingo Olivieri, como los hermosos jarrones de los que brota un penacho en llamas que coronan las pilastras del monumento.

Tímpano del lado sur
Remate del monumento
Esfinge este