Sofocada la revuelta, Ivanovski se vio forzado a abandonar su patria y en 1851, en la ciudad de Hamburgo, se enlistó en el ejército del Imperio del Brasil con el nombre de Enrique Reich.
[2] Como soldado raso, participó en la batalla de Caseros en las filas del Ejército Grande.
En Montevideo se enlistó para servir en el Batallón San Martín y luego pasó al Regimiento 3 de Infantería.
Logrado el éxito sin acciones militares, informó lacónicamente a Sarmiento que la revolución había sido vencida.
Con candor y lealtad a su amigo, el general José Miguel Arredondo, Ivanowsky le mostraba las misivas del presidente.
Después de vencer a Arredondo, el por entonces coronel Julio Argentino Roca le rindió homenaje delante su modesta tumba; sobre esta una placa reza: «Al General Ivanowsky, la República agradecida».
Distintas calles en Posadas, Villa Mercedes, La Tablada y Parque San Martín también llevan su nombre.