Combatió a favor del cristianismo y se convirtió en el primer monarca en participar en una cruzada.
Por una alianza estratégica entre Magnus III y el rey irlandés Muirchertach Ua Briain, Sigurd se casó con una hija de este último.
Hasta entonces, el viaje se desarrollaba sin contratiempos, pues en el norte de la península gobernaban reyes cristianos que habían iniciado la Reconquista.
Cuando prosiguió la navegación hacia el sur, se enfrentó en constantes escaramuzas contra los musulmanes, tanto para conseguir provisiones como para debilitar el dominio islámico en la península ibérica.
Combatió en Sintra, Lisboa y Alcácer do Sal, contribuyendo a que esas ciudades fuesen incorporadas al dominio cristiano.
Sigurd visitó Jerusalén y los Santos Lugares de la zona, entre ellos el río Jordán, donde había sido bautizado Jesucristo.
Probablemente esos noruegos volvieron a su patria después de acumular cierta riqueza en la capital imperial.
Según Snorri Sturluson, Sigurd era aventajado por su hermano no sólo en presencia física, sino también en elocuencia, conocimientos y aptitud para tejer relaciones sociales.
Un acontecimiento de esta época fue una pequeña campaña militar en Småland, Suecia, donde los habitantes habían renegado del cristianismo y retomado la creencia pagana nórdica.
Por un tiempo, tres hijos de Magnus III gobiernan juntos Noruega, Sigurðr apodado el Cruzado que lanza su campaña hacia Jerusalén,[2] Eysteinn y Óláfr.
Bjørnstjerne Bjørnson escribió un drama histórico basado en la vida del rey, y Edvard Grieg compuso la suite orquestal Sigurd Jorsalfar.
Sigurd fue casado por su padre con Biadmunia (n. 1094/97), una hija del rey Muirchertach Ua Briain en 1102 o 1103, cuando tenía alrededor de 13 años.