Pedro de Castilla (1394-1461)

El interés del rey Juan II de Castilla, sobrino suyo en segundo grado, hizo que fuese elevado al episcopado, recibiendo la sede oxomense.

[1]​ Su ambición aspiraba a más y, ante el hecho de que fue postergado en otras elecciones, aunque a veces contase incluso con el apoyo regio, decidió abandonar el bando regio y apoyar a la nobleza en la sublevación de 1439.

Esto le valió el obispado de Palencia,[2]​ mucho más rico, pero puso fin a su carrera política, puesto que el rey dejó de contar con su apoyo durante mucho tiempo.

Durante su obispado de Palencia realizó numerosas mejoras en la iglesia, torre y palacio episcopal de Villamuriel de Cerrato Hasta ese momento había colaborado con el rey en la Audiencia Real y había pertenecido al Consejo Real, puestos que tardaría muchos años en recuperar, junto con la confianza regia.

Durante su etapa en la universidad de Salamanca mantuvo una relación con la noble castellana María Fernández Bernal de la que tuvo cuatro hijos, que posteriormente serían legitimados por el rey Juan II de Castilla:[3]​ Posteriormente mantuvo otra relación con Isabel Drochelin,[4]​ criada inglesa de la reina Catalina, con quien tuvo otros cuatro: