Alonso Fernández de Madrid

[7]​ Desde esta fecha figura Alonso de Madrid en todas las comisiones de importancia que surgen del Cabildo catedralicio, especialmente en lo que se refiere a la edición de libros y al control de los mismos, organizando nuevas bibliotecas y recogiendo breviarios, cantorales y libros de registro parroquiales.[10]​ En el caso de Fernández de Madrid, su territorio fue la comarca palentina del Alcor, aunque su creciente influencia sobrepasó ampliamente esas tierras.Continuó con su nuevo cargo realizando un intenso trabajo como bibliotecario y administrador diocesano, además de sus nuevas funciones legales, que incluían castigar los delitos contra la honestidad y las buenas costumbres.[13]​ El arcediano dejó su cargo de provisor tras obtener el obispo una providencia real para proceder contra cualquier dignidad, canónigo o clérigo que cometiere delito, contraviniendo el estatuto del Cabildo.[14]​ Alonso Fernández recibió una sólida formación humanista y se mostró siempre admirador de dos grandes humanistas, el propio fray Hernando de Talavera, del que compuso la primera biografía y Erasmo de Róterdam, siendo el traductor al castellano de una de sus principales obras, el Manual del soldado cristiano.
Portada del libro "Manual del caballero cristiano", traducido por Alonso Fernández de Madrid en 1528.
Portada del libro " Manual del caballero cristiano ", traducido al español por Alonso Fernández de Madrid en 1528.