Turnismo

[2]​ Como en el régimen político de la Restauración la formación de gobierno no dependía del triunfo en las elecciones, sino de la decisión de la Corona en función de una crisis política o del desgaste en el poder del partido gobernante, con sólo dos grandes partidos que se «turnaran» en el gobierno era suficiente para que el sistema funcionara: uno que representara un liberalismo más conservador, que constituiría «la derecha» del sistema; otro más progresista, que constituiría su «izquierda».[…] Lo primero que vio claro fue la necesidad de controlar la prerrogativa regia, de normativizarla y darle criterios fijos, lejos del criterio personal; conseguir un equilibrio entre el poder regio y el parlamentario, para lo que iban a ser árbitros precisamente los jefes de los partidos.[…] El rey tendría que atenerse a la opinión pública representada por los grandes partidos.Cánovas comunicó su decisión al líder liberal y este aceptó en una reunión que mantuvieron en la presidencia del Gobierno por mediación del general Martínez Campos y que sería conocida equivocadamente como el «Pacto de El Pardo».La secuencia de ocupación del poder entre el Partido Conservador y el Partido Liberal muestra a la perfección cómo se llevó a cabo esta práctica:
Caricatura en El Motín representando a Cánovas del Castillo y a Sagasta columpiándose en un tronco apoyado en las espaldas de una alegoría de España. El pie de imagen dice: "Sube el uno, baja el otro, y España siempre en el potro".
Caricatura que celebra el abandono del poder del Partido Conservador , con Cánovas al frente seguido de sus ministros ( los pájaros de la noche ). El pie de imagen dice: «Apenas se dibuja en el horizonte el sol de la libertad, los pájaros de la noche huyen despavoridos». Revista satírica El Buñuelo , 17 de febrero de 1881.
Caricatura de Sagasta y Cánovas , en la que se hace alusión expresa al Pacto de El Pardo , en la revista satírica española Don Quijote , 1894.
Caricatura de Segismundo Moret (líder liberal) y de Antonio Maura (líder conservador), titulada «Novedades teatrales: "los gemelos"» (revista Gedeón , 1909). Critica la falta de pluralismo político como consecuencia del «turno», ya que los dos partidos gemelos defienden lo mismo.