Estos modelos reproducen en escala más reducida las situaciones que se verifican en la naturaleza, generalmente usando materiales semejantes.Con el paso del tiempo estos modelos han dejado de ser utilizados por las dificultades prácticas en su manejo; si la escala de los modelos es grande, es decir que el modelo es pequeño, en relación con el acuífero real, la importancia de otros fenómenos naturales, como por ejemplo la capilaridad, pasa a tener una preponderancia que no es real en la situación natural que se está simulando.Para la utilización de estos modelos se hace imprescindible contar con laboratorios hidráulicos bien equipados.[2] Si una membrana elástica es puesta en tensión, y con la punta de un lápiz ejercemos una presión sobre la misma, esta adquiere una forma muy semejante a la del cono de depresión que se produce en un acuífero homogéneo al extraerse agua desde un pozo.Sin embargo estos modelos solo son aplicables al estudio de situaciones estacionarias.Utilizando un fluido conductor como por ejemplo el agua o un semifluido como una gelatina, sobre una base no conductora, la que puede ser fácilmente recreada para simular la forma del acuífero real, se puede determinar el comportamiento en la situación estacionaria del acuífero.Existen artificios, como por ejemplo modificar la escala del modelo para simular el aumento o disminución de la permeabilidad.Este tipo de modelo analógico es el más citado en la bibliografía especializada, donde se describen con detalle interesantes aplicaciones.Es evidente que tanto los modelos físicos como los analógicos se basan en principios y ecuaciones matemáticos.Sin embargo debe recordarse que este es el procedimiento ideal para la resolución de las ecuaciones.Cuando las condiciones de contorno son simplificadas, incluyendo las variaciones temporales, las ecuaciones pueden ser resueltas por este procedimiento.[9][10][11] El analizador diferencial es por definición un instrumento destinado a resolver ecuaciones diferenciales, pero no es apto para resolver ecuaciones de derivadas parciales, por lo tanto para utilizarlo en estos propósitos exige importantes simplificaciones que lo hacen poco atractivo como método general.Las condiciones iniciales se refieren a los valores iniciales de elementos que, en el interior del modelo, pueden cambiar en el curso del tiempo y cubren mayormente los mismos elementos como las condiciones de límite.[19] El flujo radial pasa por una sección transversal vertical cilíndrico representando el equipotencial del cual la superficie se disminuye en la dirección del eje de intersección de los planos radiales donde el pozo está colocado (fig.Acuíferos semi-confinados con una capa poco permeable por encima de un acuífero artesiano en que el agua se encuentra bajo una presión mayor que la presión hidrostática pueden ser incluidos en el modelo semi 3-dimensional por simulación del flujo vertical bajo una sobre-presión con respecto al nivel freático.Ya que muchos parámetros tienen bastante variación espacial, se necesita una opinión experta para llegar a valores representativos.Este análisis puede rendir una impresión aproximada del comportamiento del agua subterránea, pero también puede servir para hacer un análisis de sensibilidad que ayuda responder a la pregunta: ¿qué factores tienen influencia significante y cuales no?Can tal información se pueden restringir las investigaciones a los factores de mayor importancia.Esto significa que el flujo subterráneo, como gobernado por la conductividad hidráulica, concuerda con las condiciones de salinidad.
Fig. 2. Sección transversal de un acuífero semi-confinado y algunos datos de entrada
Factores hidrológicos a la superficie de suelo que determinan la recarga
Fig. 3. Condiciones de límite
Fig. 4. Ejemplo de parámetros de un modelo de riego combinado con un modelo de agua subterránea