Ocupó varios cargos públicos bajo la protección del entonces presidente Francisco de Paula Santander[5], su amigo y protector.
[7] Debido a sus creencias políticas liberales, Lleras se exilió en Estados Unidos, donde perfeccionó su dominio de los idiomas inglés y francés.
Lleras también se desempeñó como secretario del Ministerio de Relaciones Exteriores en 1853, aunque se vio envuelto en problemas debido a un error en las negociaciones con Brasil, lo que resultó en su renuncia.
Como educador, Lleras fundó el Colegio del Espíritu Santo en 1846 y lo dirigió hasta 1852.
De sus obras más notables fue "Nacimiento, Fortuna y Mérito" o "La Prueba Electoral," una comedia en prosa francesa de M. Casimiro Bonjour adaptada para el teatro granadino en 1838.
La mayoría de sus traducciones se publicaron en la revista Crónicas del Colegio del Espíritu Santo (1847-1851), fundada por Lleras para informar sobre los festivales teatrales realizados en la institución que él mismo creó.
Igualmente, pasó un período en prisión bajo la acusación de complicidad en una campaña a favor del teatro liderada por el periódico El Bogotano, lo que resultó en la suspensión de su labor en las artes escénicas.
Su teatro no se limitaba a la mera representación escénica, sino que abrazaba una profunda vocación educativa.
Distinguiéndose por la inclusión de autores y obras previamente desconocidos en el contexto colombiano, su repertorio teatral se enriquece aún más al incorporar óperas que conferían un matiz musical a las actuaciones.
Su escenario no conocía límites geográficos, ya que se desplegaba en diversos espacios, desde escenarios al aire libre hasta aulas de clase, patios y parques.
Gracias a la labor en pro del teatro de Lorenzo María Lleras y sus seguidores, se multiplicaron las puestas en escena en la capital, perceptibles con menor intensidad en otras ciudades, y que se creó un clima propicio para la creación de obras dramáticas, un buen número de las cuales sin embargo quedarían inéditas.