[2] Los malabares han sido registrados en muchas culturas tempranas, incluyendo las civilizaciones Egipcia, Nabateo, China, India, Griega, Romana, Nórdica, Azteca y Polinesia.
[3][4][5] Otra fuente de información es el Talmud, donde se hace referencia al rabino Rabán Shim'ón Ben Gamliel que hizo malabares con ocho antorchas encendidas y también con vasos de vino, sin derramar ninguna gota[6] Los malabares en la antigua China eran un arte realizado por algunos guerreros.
Uno de estos guerreros fue Xiong Yiliao, cuyos malabares con nueve pelotas frente a las tropas en un campo de batalla supuestamente hicieron que las tropas contrarias huyeran sin luchar, lo que resultó en una victoria completa.
[7] En Europa, los malabares fueron una diversión aceptable hasta el declive del Imperio Romano, tras lo cual la actividad cayó en desgracia.
Los bardos de algunos reyes y nobles, fantasmas, o bufones habrían sido capaces de hacer malabares o realizar acrobacias, aunque sus principales habilidades habrían sido orales (poesía, música, comedia y narración).
Unos años más tarde, empleó a malabaristas para que realizaran actos junto con los de caballos y payasos.
Se desarrolló la elaboración del caucho y los malabaristas empezaron a utilizar pelotas de goma.
El término fue llevado a la península ibérica, donde tanto el idioma portugués como el castellano lo acabaron adoptando en su uso cotidiano.
El antipodismo propiamente dicho también incluye muy a menudo el malabarismo y la manipulación de diversos objetos.
Favorece la concentración, la velocidad de reacción, la imaginación espacial, así como el sentido del tiempo, el ritmo y el equilibrio.
Por otro lado, la pars posterior izquierda sulci intraparietalis, que controla el agarre de objetos, cambió.
Pudieron demostrar que existe una correlación positiva entre la capacidad de equilibrio y el éxito escolar.
Los malabares pueden convertirse así en una forma especial de meditación: Uno concentra toda su atención en un patrón más o menos simple, pero perfectamente periódico y generalmente muy simétrico, que puede controlar completamente.