Hernando de Ávila

Hernando de Ávila (c.1538 -1595), fue un pintor e iluminador renacentista español, hijo del pintor abulense Lorenzo de Ávila y según Ceán Bermúdez discípulo de Francisco Comontes, trabajó en El Escorial al servicio de Felipe II.

Hizo también, según Ceán, el diseño para el retablo mayor de las monjas de Santo Domingo el Antiguo en 1576, por el que se le pagaron 1700 maravedís, trazas que ya habían sido atribuidas por Antonio Palomino al Greco.

En 1573 pasó a Madrid, donde desde 1574 se le encuentra colaborando con Alonso Sánchez Coello, con quien mantuvo una estrecha amistad,[1]​ en obras como el retablo de la desaparecida iglesia del convento de la Victoria y el de Colmenar Viejo, contratado ya en 1566 pero cuyas obras no dieron comienzo hasta 1574.

En 1591 presentó un proyecto para el dorado y pintura de la Sala de los Reyes y el Cuarto del Cierzo del Alcázar de Segovia.

Escribió también un perdido Libro del arte de la pintura del que dio noticia su coetáneo Diego de Villalta en su tratado De las estatuas antiguas (1590), asegurando que en él había recopilado noticias y obras de los más prestigiosos pintores de la época.

Alfonso II de Oviedo , iluminación del Libro de retratos de los reyes (1594), Madrid, Museo del Prado .
Retablo de la Encarnación; Hernando de Ávila y Luis de Velasco (1584); Museo de Santa Cruz, Toledo