Golfines
Golfines fue la denominación que se dio en la España medieval durante la Reconquista a un grupo peculiar de bandoleros y salteadores formado por soldadesca mercenaria ociosa que se dedicaba a robar cuando la paz hacía que no fueran contratados para luchar.Habían venido a Castilla por una llamada a la santa cruzada de Alfonso VIII en 1212, bendecida por el papa Inocencio III, para luchar contra el Islam, que los absolvería de sus pecados; pero, concluido el trabajo con la victoria de las Navas de Tolosa en ese año, en lugar de marcharse (y quizá por no percibir el salario prometido) se quedaron en un amplio territorio entre La Mancha y Extremadura, alquilándose como ejércitos privados para nobles con disputas territoriales (los Castro y los Lara, por ejemplo, en el reino de Toledo) y dedicados al pillaje o a robar ovejas, lana merina y cosechas.[4] Sobre este personaje del siglo XIII cuenta Julián de Zugasti ciertos hechos novelescos en el tercer tomo de su obra El bandolerismo, estudio social.[6] José María Quadrado los define como “vagos, malhechores, criminales, prófugos, hidalgos arruinados por el juego o por los vicios”.Algunos de estos mercenarios consiguieron, sin embargo, ennoblecerse.