Siendo aún niño, se trasladó con su familia a Luján, provincia de Buenos Aires.
Vivió ocho años entre los indígenas, llegando a perder por completo el uso de la lengua española.
En 1833 participó en la Campaña de Rosas al Desierto, como ayudante del gobernador, y a órdenes del coronel Leandro Ibáñez hizo la expedición hasta Valcheta, punto más austral de la campaña y donde fue vencido el cacique Cayupán.
También hizo una incursión a órdenes del coronel Ramos, y posteriormente quedó con el general Manuel Corvalán en Bahía Blanca.
Desde distintos puntos de la frontera, aliado a los boroganos que quedaban y a Calfucurá, hizo tres campañas sobre los ranqueles de Yanquetruz y su sucesor Painé Guor.
En 1845 fundó el fuerte de Bragado, del que fue comandante hasta el año 1850.
Al parecer, ambos bandos consideraban sus servicios como baqueano y lenguaraz como indispensables.