Sus dirigentes oscilaron entre oficializar la independencia nacional del Estado y la pretensión de que ellos representaban a toda la Nación.
En 1857, debido a la confiscación rosista de la fortuna familiar, tuvo que descartar la alternativa de estudiar abogacía, ya que en esa época era muy costoso ingresar a la universidad.
Allí imaginó por primera vez a su alter ego, el gaucho «Anastasio el Pollo», e ideó la acción por la cual el gaucho, no habiendo presenciado jamás una representación teatral, confunde ficción con realidad y comienza a desvestirse para salvar la vida de una de las artistas, que aparenta estar ahogándose, y solo la oportuna caída del telón salva a la cantante de su salvataje.
La Grúa, siendo una simpática narración del suceso en verso gauchesco, y convirtiéndose en un rotundo éxito.
Del Campo utiliza esta ópera como referente para un poema que es su obra más conocida y recordada: Fausto, Impresiones del gaucho Anastasio el Pollo en la representación de la Ópera, popularmente llamada El Fausto de Estanislao del Campo o El Fausto criollo.
En diciembre renunció a la banca legislativa, para poder fundar el periódico liberal Porvenir Argentino.
Estanislao del Campo fallecería joven, a los 46 años, en Buenos Aires, el 6 de noviembre de 1880, el mismo año en que se le había otorgado la jubilación con sueldo íntegro, que poco pudo gozar.
Manuel Mujica Lainez escribió su biografía, titulada Vida de Anastasio el Pollo (1948).
Se uniría en matrimonio en el año 1864 con Carolina Micaela Lavalle Darregueyra (n. Buenos Aires, 1832 - m. 1889) —sobrina del general Juan Lavalle—, quien fuera hija de Francisco Lavalle González Bordallo (Santiago de Chile, 1801 - Buenos Aires, 1836) y de Juana Micaela Darregueyra Luca (n. Buenos Aires, 1805).