[cita requerida] Los cerdos son los principales reservorios del virus, y allí se multiplican intensamente.
Asimismo, los lechones infectados pueden eliminar virus por el semen, y las hembras gestantes pueden experimentar reducción de camadas, tras sufrir viremias transitorias.
Durante los meses invernales, el virus puede ser mantenido en murciélagos o bien en los propios vectores, debido a su transmisión transestadial y transovárica.
[cita requerida] Las especies afectadas por la enfermedad son el ser humano, el caballo y el cerdo.
[cita requerida] Una vez inoculado, el virus se replica en los ganglios nerviosos regionales y se difunde por vía linfohemática, provocando una viremia débil y a menudo afebril que induce una respuesta humoral que neutraliza en breve el virus circulante.
En algunos casos, sin embargo, el virus llega a localizarse en el sistema nervioso central, donde se replica de nuevo y produce una grave encefalitis no purulenta.
A menudo la producción local de anticuerpos consigue eliminar el virus, pero la letalidad es considerable y los supervivientes pueden sufrir graves secuelas neurológicas.
[cita requerida] Las lesiones encefalíticas suelen ser áreas bastante amplias de necrosis cortical, con neuronolisis y neuronofagia e intensa infiltración mononuclear, con algunas hemorragias.