Emma

El personaje principal, Emma Woodhouse, es descrito como "hermosa, lista y rica" pero también es bastante mimada.

Vive con su padre, un hipocondríaco caracterizado principalmente por su excesiva preocupación por la salud y el bienestar de aquellos a los que ama.

El amigo de Emma y la única persona que la critica es el caballeroso señor Knightley, su "vecino" y cuñado (hermano del marido de su hermana), dieciséis años mayor que ella.

Cuando su institutriz, la señorita Taylor, que era prácticamente su amiga y confidente, decide casarse, Emma se queda sola ante sus propios sentimientos.

Emma, pagada de sí misma, cree que el matrimonio se debe a ella, por haber sido quien presentó a la señorita Taylor su futuro marido, el señor Weston.

Su intriga casamentera va mal cuando resulta que el señor Elton, un trepador social, quiere casarse con la propia Emma.

Al casarse la señorita Campbell, Jane regresó entre sus familiares para preparar (con temor) su futuro, que es ganarse la vida como institutriz.

La trama se complica pues Emma intenta enamorarse de Frank simplemente porque todo el mundo dice que hacen una buena pareja.

Sólo el señor Knightley, hombre de temple y aplomo probados, se atreve a recriminar los errores de Emma, y será este quien ponga fin a la confusión que Emma ha provocado.

Emma descubre que Jane y Frank llevan secretamente prometidos casi un año.

Aunque ha jurado no casarse nunca, le encanta urdir matrimonios para el resto.

Suele discutir constantemente con la señora Weston debido a la educación malcriada de Emma, por quien siente un gran y profundo afecto.

Al final el señor Knightley se casa con la señorita Emma Woodhouse.

El señor Elton muestra su naturaleza materialista casándose rápidamente con otra mujer con recursos después del rechazo de Emma.

La señorita Bates, una solterona cuya madre es amiga de la del señor Woodhouse.

Emma permanece sorprendentemente inmune a la atracción romántica y el deseo sexual.

En contraste con heroínas de Austen como Elizabeth Bennet y Marianne Dashwood, que se sienten atraídas por el hombre equivocado antes de asentarse con el correcto, Emma no muestra ningún interés romántico en los hombres que conoce.

Queda genuinamente sorprendida y de alguna manera repugnada cuando el señor Elton le declara su amor.

La New Monthly Magazine del 1 de febrero de 1816. El espacio que le da a las noticias de "Novels, Tales, &C." en la primera columna ilustra qué poco mérito se atribuía a las novelas de Austen a juicio de al menos algunos de sus contemporáneos.