Elecciones presidenciales de Argentina de 1910

Sáenz Peña realizó una reforma que cambió de raíz el régimen electoral, democratizando el sistema político.

Por entonces se venía debilitando la línea roquista del Partido Autonomista Nacional (PAN), que había monopolizado la política argentina en las anteriores cuatro décadas.

En 1910 la República Argentina estaba constituida por quince distritos electorales (14 provincias y la Ciudad de Buenos Aires), en los que la población tenía derecho a voto, mientras una gran parte del territorio estaba organizada en diez «territorios nacionales», donde la población no tenía derecho a voto.

Sáenz Peña, que era el embajador en Italia y no hizo campaña, fue elegido casi por unanimidad.

Inmediatamente inició las negociaciones con el exiliado líder de la Unión Cívica Radical, Hipólito Yrigoyen, que se encontraba en Roma, para instaurar un régimen democrático en el país, teniendo que luchar contra un congreso aún conservador.