El derecho a la pereza

El derecho a la pereza (en francés, Le droit à la paresse) es un ensayo habitualmente considerado utópico del autor franco cubano Paul Lafargue, su primer trabajo teórico, redactado en Inglaterra en 1880 para su primera publicación en el diario L'Egalité y posteriormente, como folleto 1883.En la obra, Lafargue realiza una crítica marxista del sistema económico nacido del capitalismo, cuyo desarrollo, concluye, desembocaría en una crisis de superproducción, causa de paro y miseria entre la clase trabajadora.[1]​ Tras la Revolución rusa y con el auge del pensamiento partidario de las políticas soviéticas del productivismo, que es criticado en la obra de Lafargue, el texto fue relegado hasta que tras la Segunda Guerra Mundial fue redescubierto para su reedición y reivindicación por sectores muy dispares, abandonando su condición de obra ideológica para convertirse en patrimonio universal.Lafargue propone reducir las jornadas laborales a 3 horas como máximo y mejorar el poder adquisitivo de la clase trabajadora como soluciones a las crisis de superproducción periódicas, pero oponiéndose al interés capitalista por el beneficio económico y apuntaba como ejemplo las políticas realizadas entonces en Inglaterra y Estados Unidos en favor del maquinismo.La burguesía se "acomoda" a este modo de vida y ya no puede prever un retorno al pasado.Para sofocar estos levantamientos, los capitalistas "se rodean de pretorianos, policías, magistrados y carceleros mantenidos en una improductividad laboriosa".Dado que estas medidas todavía no son suficientes para eliminar toda la sobreproducción, el recurso al desempleo es inevitable.Paul Lafargue cita a los gallegos coma un ejemplo negativo, junto escoceses, auverneses, pomeranos y chinos.
Paul Lafargue , autor de El derecho a la pereza , en 1869.
Dios descansa con su creación , por Julius Schnorr von Carolsfeld (1860). Lafargue dice:
« Jehová , el dios barbado y huraño, dio a sus adoradores el supremo ejemplo de la pereza ideal; después de seis días de trabajo, descansó por toda la eternidad».
Fábrica de la era victoriana , s. XIX.
Acueducto y molinos de Barbegal , siglo II d. C.. Lafargue cita al poeta Antipatros sobre cómo el molino de agua "iba a emancipar a las mujeres esclavas y a recuperar la edad de oro ".
Lafargue cita a clásicos como Aristóteles que alababan el descanso y el ocio por encima del trabajo.
Un baño en Asnieres , Georges Pierre Seurat (1884). Lafargue sugiere que con tres horas de trabajo al día los hombres podrían dedicarse al ocio .