Cuando los monjes theravāda se alimentan de limosnas, deben comer cualquier sobra que les den, incluyendo carne.
La misma restricción aplica a los budistas laicos y se conoce como el consumo de la ‘carne triplemente limpia’ (三净肉).
Este acto fue realizado deliberadamente por Buda para demostrar que, si es necesario, un budista puede infringir las normas en caso de emergencia o inconveniencia.
El budismo chino y parte del coreano se adhieren estrictamente al vegetarianismo.
Por tanto, hablando estrictamente no se usan raíces (como patatas, zanahorias o cebollas), ya que resultaría en la muerte de la planta.
Para muchos budistas chinos, el consumo de ternera, otros animales grandes y especies exóticas debe evitarse.
El consumo de alcohol y otras drogas también es evitado por muchos budistas, ya que afectan a su estado mental.
Los cocineros vegetarianos budistas se han vuelto extremadamente creativos imitando la carne a partir del gluten de trigo preparado o seitán, la soja (en forma de tofu o tempeh), agar-agar y otros productos vegetales.
Algunos de estos cocineros vegetarianos budistas están en muchos monasterios que sirven platos wu hun y de carne falsa a los monjes y visitantes (incluyendo no budistas que a menudo se quedan unas horas o días).