Ciclón extratropical Klaus

[2]​ Fue un fenómeno extraordinario que no se repetía con tanta virulencia en España desde 1997.

[1]​[3]​ El fenómeno causante de la borrasca especialmente profunda (o ciclón extratropical) fue una ciclogénesis explosiva.

Esta se produce cuando dos masas de aire diferentes, una cálida y otra fría, chocan generando fuertes vientos y abundantes precipitaciones, desarrollándose en un corto periodo de tiempo.

[4]​[5]​ Se reportaron 26 víctimas mortales relacionadas con la situación meteorológica, 12 de ellas en España.

[9]​ Este tipo de borrascas con una caída tan brusca de la presión solo se da con frecuencia en latitudes más altas (Groenlandia, Islandia...), siendo mucho menos frecuentes en nuestras latidudes.

[1]​ Es preciso no confundir este tipo de tormentas con los ciclones tropicales cuya formación sigue un proceso muy diferente.

[15]​ En el País Vasco se esperaba que los fuertes vientos llegaran entre las 00:00 y las 08:00 del día 24.

Fue profundizándose rápidamente con el paso de las horas, llegando a caer hasta los 968 hPa estimados a las 00:00 del 24 de enero: Klaus se convierte en lo que los meteorólogos conocen como una bomba meteorológica.

Durante la noche del 23 al 24 se producen violentas rachas de viento, siendo La Coruña la provincia con los valores más altos.

Un pesquero portugués se hundió a 60 millas de la costa coruñesa por el fuerte oleaje, y aunque toda la tripulación pudo ser rescatada en helicóptero, el capitán falleció víctima de un infarto al llegar a tierra.

Los cortes se prolongaron varios días en zonas rurales de La Coruña.

[21]​ En Portugal, cerca de 600 automovilistas debieron ser rescatados por protección civil ya que 21 carreteras fueron convertidas en impracticables por el temporal en las regiones de Viseo, Braga y Vila Real.

Al mismo tiempo, la tormenta llega a Gers donde 27 000 hogares son privados de electricidad.

[29]​ Unos 400 bomberos, 300 gendarmes, 40 operarios del SNCF y 100 empleados municipales intervienen en esta aglomeración urbana para hacer frente a la emergencia.

Durante la mañana, el prefecto de las Landas declara el plan Orsec para su departamento.

Igualmente, se registraron daños significativos en el mobiliario urbano, en cabinas telefónicas o señales de tráfico.

En el momento más intenso del episodio meteorológico, cerca de 200 000 clientes sufrieron cortes de electricidad según la Generalidad y se interrumpe el tráfico ferroviario en las principales líneas regionales.

La alerta roja es levantada en el último departamento al cual concierne esta medida, Pirineos Orientales, en la noche del sábado 24 de enero.

[27]​ Al día siguiente de la tormenta, el presidente francés Nicolas Sarkozy efectúa una visita a las zonas siniestradas.

El Secours populaire, Catholic Relief Services y la Cruz Roja lanzan un llamamiento a las donaciones en favor de los damnificados.

[36]​ Los medios de comunicación se movilizan y una edición especial dedicada a la tormenta es retransmitida por France 3 Sud al final de la tarde, mientras que una noche especial bautizada «Solidarité tempête» es emitida a las 20 horas 35 por France 3 Aquitania.

El decreto implica declaraciones municipales simplificadas para 21 otros departamentos fuertemente afectados por la tormenta.

Los efectos más destructores de la tormenta provocados por la lluvia y los fuertes vientos se situaron en el suroeste de Francia mientras que en Italia provocó daños mínimos.

France Télécom ha debido movilizar a unos 3000 técnicos con el fin de intervenir sobre su red.

Mapa de alertas de la AEMET para el día 24.
Mapa que muestra la localización de la depresión. La línea roja, señala la trayectoria del centro de las bajas presiones. (CET) .
Árboles arrancados en Landas .