Castañuelas

Las castañuelas también se utilizaban como instrumentos mágicos de protección contra los malos espíritus durante el nacimiento.

Gracias al comercio, se expandieron por los países del Mediterráneo, como la actual Croacia, o la Italia meridional; aunque España es el país que mejor ha conservado las castañuelas, desarrollando su uso, siendo uno de los instrumentos nacionales, al igual que la guitarra española, clásica o flamenca.

Otros países donde las castañuelas tradicionalmente han tenido importancia son Portugal, Persia y Alemania.

Las variaciones son una técnica compositiva en que un tema se repite con cambios a lo largo de una pieza.

[6]​ Según José Blas Vega, investigador del arte flamenco, una de estas bailarinas fue retratada al daguerrotipo hacia el año 1850.

Parece tratarse de la bailarina francesa Marie Guy-Stéphan,[7]​ que actuó en el Teatro del Circo, en Madrid, entre los años 1843 y 1851.

Con un traje de estilo torero, se puso a zapatear briosamente y tocar las castañuelas.

En un momento del baile, Carmen Amaya se acerca a la cámara con los brazos en alto, al estilo de un banderillero, pero con castañuelas.

En cuanto a su nombre, la evolución es la que sigue: primero crúsmatas, luego crótalos, con posterioridad castañitas/castañetas y finalmente castañuelas/palillos.

La castañuela de la mano derecha se toca con los dedos: meñique y anular, corazón e índice.

La castañuela de la mano izquierda hay que presionarla con los dedos corazón y anular al mismo tiempo.

El ritmo debe iniciarse con la mano derecha, cortando la última nota con el sonido de la castañuela izquierda.

Bailarina de la escuela bolera , con castañuelas, hacia 1850. Daguerrotipo , Fototeca del IPCE .
Bailarina con castañuelas de Renoir , 1909
Dibujo didáctico