Casa de Flandes

La Casa de Flandes fue la primera que transformó el oficio de conde del Imperio carolingio en título hereditario, el Condado de Flandes, perteneciente a Francia Occidental, creado por el Tratado de Verdún en 843.

En 1119, tras la muerte de Balduino VII, la familia padeció numerosos reveses, pero en 1191 recuperó el Condado de Flandes con Balduino VIII (Balduino V de Henao).

La dinastía creó el Imperio latino de Constantinopla durante la Cuarta Cruzada y gobernó brevemente el condado de Namur (1188-1212).

Finalmente, la muerte de Margarita II en 1280 puso fin la dinastía.

Una rama cadete, la Casa de Boulogne, gobernó el condado de Boulogne y tomó parte en la Primera Cruzada, creando el Reino de Jerusalén y aportando sus primeros gobernantes.