No fue hasta agosto de ese mismo año cuando las autoridades británicas decidieron tomar medidas para rescatar a Gordon y sus hombres.
Cuatro piezas de artillería ligera[7] y una pequeña Brigada Naval con una ametralladora Gardner completaban la columna.
[4][8] Debido a que ya era una hora avanzada del día, los británicos optaron por no atacar y esperar al día siguiente y construyeron un campamento fortificado para pasar la noche, que fue calmada por parte de ambos bandos.
El flanco izquierdo del cuadrado estaba formado por el regimiento de camellos pesado, la infantería montada y la ametralladora Gardner para proporcionar cobertura a las tropas.
Sin embargo, encontraron el interior del cuadrado lleno de camellos que hacía imposible el avance.
Los mahdistas tuvieron unos 1100 muertos, una cifra elevada si se tiene en cuenta que aproximadamente sólo la mitad de sus hombres tomaron parte en el combate.
El héroe nacional, el coronel Frederick G. Burnaby, de los Royal Horse Guards fue muerto al ser alcanzado en el cuello con una lanza.
Los derviches del Mahdi gobernaron Sudán en los siguientes trece años y los británicos se retiraron de la región.
El enfrentamiento fue inmortalizado por el poeta escocés William Topaz McGonagall, quien le dedicó un poema, lo mismo que sir Henry Newbolt.