Debido a los altos impuestos aplicados y al sangriento inicio del gobierno turco-egipcio en Sudán, este sistema colonial era detestado por el pueblo sudanés.
En años malos, especialmente durante sequías y hambrunas, los agricultores no podían pagar los altos impuestos.
Estos migrantes, conocidos como "jallaba" por sus vestimentas sueltas, empezaron a fungir como pequeños comerciantes e intermediarios para las compañías comerciales extranjeras que se habían instalado en las ciudades y pueblos del centro de Sudán.[cita requerida].
Por lo tanto, el papel de los británicos en los asuntos internos egipcios se incrementó gradualmente.
En 1873, Ismail había nombrado a Charles George Gordon como gobernador de las Provincias Ecuatoriales del Sudán.
En los tres años siguientes, el General Gordon luchó contra Al-Zubayr Rahma Mansur, un jefe nativo de Darfur.
Hasta la abdicación de Ismail en 1877, Gordon vio que su apoyo se había reducido gravemente.
Sus políticas pronto fueron abandonadas por los nuevos gobernadores, pero la furia y el descontento de la dominante minoría árabe no fueron resueltos.
[5] El Mahdi también legitimó su movimiento al trazar deliberados paralelismos con la vida del Profeta Mahoma.
[7] Con el gobierno egipcio pasando principalmente bajo control británico, las potencias europeas estaban cada vez más al tanto de los problemas en Sudán.
Hasta su aproximación, Muhammad había formado un ejército de alrededor de 40 000 hombres y los había entrenado rigurosamente en lo que a tácticas militares respecta, equipándolos con las armas y municiones capturadas en las batallas anteriores.
[9] En aquel entonces, el Imperio británico se estaba involucrando cada vez más en la estructura del gobierno egipcio.
A los nominados al puesto-primero Sir Auckland Colvin y después Edgar Vincent[11]-se les instruyó que ejerzan la mayor parsimonia posible en los asuntos financieros de Egipto.
El gobierno egipcio solicitó que un oficial británico fuese enviado al Sudán para coordinar la retirada de las guarniciones.
Se esperaba que las fuerzas mahdistas considerarían demasiado riesgoso atacar a un súbdito británico, lo cual permitiría efectuar la retirada sin incidentes.
Sin embargo, también era conocido por su agresividad y rígido honor personal,[13] que lo hacían inadecuado para esta misión ante varios importantes oficiales británicos en Egipto.
Al final se le encomendó la misión a Gordon, pero iría acompañado por el más equidistante y confiable Coronel John Stewart.
Las órdenes de Gordon, por su propia solicitud, eran inequívocas y dejaban poco lugar para una errónea interpretación.
[22] Haya sido intención del Mahdi o no, en marzo de 1884 las tribus sudanesas que habitaban al norte de Jartum, las cuales anteriormente habían simpatizado o permanecido neutrales a las autoridades egipcias, se levantaron apoyando al Mahdi.
[28] Cuando el gobierno británico vetó esta idea, Gordon propuso una serie de alternativas para salvar su situación y las presentó a sus superiores.
Ente aquellas alternativas figuraban: Finalmente, resultó imposible que Gordon fuese auxiliado sin necesidad de soldados británicos.
Los británicos también enviaron una fuerza expedicionaria al mando del Teniente-General Sir Gerald Graham, que incluía un contingente indio, a Suakin en marzo de 1885.
Entre 1886 y 1889, una expedición británica para auxiliar al gobernador egipcio de Ecuatoria se abrió paso a través del África Central.
La situación evolucionó de tal manera que permitió a Egipto, tanto política como militarmente, reconquistar el Sudán.
Escritas en colaboración con Reginald Wingate, un partidario de la reconquista del Sudán, ambas obras ponían énfasis en el salvajismo y la barbarie de los mahdistas,[34] y gracias a la amplia publicidad que tuvieron en Inglaterra, influenciaron a la opinión pública para apoyar la intervención militar.
[35] En 1896, cuando Italia sufrió una gran derrota por parte de los etíopes en Adua, la posición italiana en el África Oriental fue seriamente debilitada.
Esto coincidió con la creciente amenaza de una expansión francesa en las regiones del Alto Nilo.