Morgan es conocida en el mundo del arte y la danza por sus estudios de los bailarines modernos estadounidenses Martha Graham, Merce Cunningham, Erick Hawkins, José Limón, Doris Humphrey, Charles Weidman, entre otros.
El diseño abstracto se enseñaba en paralelo al dibujo y la pintura figurativa.
La historia del arte se explicaba con un énfasis significativo en las tradiciones artísticas primitivas, asiáticas y europeas.
En ese mismo año, Prudence Wollet, en ese mismo periódico, escribía: "Para lograr una independencia absoluta, Barbara Morgan se ha tomado una gran libertad hasta la fecha... Sostengo que vale la pena seguir a esta experimentadora".
[3] En 1925, Barbara Johnson se casó con Willard D. Morgan, un escritor que ilustraba sus artículos con sus fotografías, y tuvo dos hijos, Douglas O. Morgan, quien más tarde se casaría con la fotógrafa Liliane de Cock,[4][5] y Lloyd B.
Willard supo ver la importancia de la fotografía como el verdadero arte moderno del siglo XX.
En 1927, organizó una exposición junto con su colega Annita Delano sobre el trabajo del fotógrafo Edward Weston en la Galería UCLA.
Willard tenía dos Leicas Modelo A, con las que la pareja se fotografiaba mutuamente en ruinas de acantilados, escalando el monumento nacional Puente del Arco Iris o en las mesetas y cañones Hopi.
Mientras Barbara estudiaba en UCLA, Albert C. Barnes le ofreció una beca, por lo que ella aprovechó un viaje por el este para visitar su colección de arte en Merion, Pensilvania.
Posteriormente la Barnes Foundation permitió a Willard y Barbara fotografiar toda su colección, como forma de estudio.
Inmediatamente quedó impresionada por la importancia histórica y social del emergente movimiento de danza moderna estadounidense.
Entre ellos están Valerie Bettis, Merce Cunningham, Jane Dudley, Erick Hawkins, Hanya Holm, Doris Humphrey, José Limón, Sophie Maslow, May O'Donnell, Pearl Primus, Anna Sokolow, Helen Tamiris y Charles Weidman.
Le llamaba especialmente la atención cómo el género podía captar la multiplicidad de la vida moderna estadounidense.
Beaumont Newhall, de George Eastman House, elogió la obra afirmando: “Sus delicadas fotografías, hábilmente intercaladas con palabras, capturan el mundo de la juventud con cordialidad y ternura, humor y simpatía.
[18][19] Durante esta sesión, Morgan dio una conferencia a toda la comunidad universitaria sobre "el papel de la luz en la fotografía".
Intercambió cartas con Edward Weston, Gordon Parks, Margaret Mead, Richard Buckminster Fuller, Joseph Campbell, William Carlos Williams, Dorthea Lange, Stuart Davis, Richard Neutra y Charles Sheeler, entre muchos otros.
[22] Morgan expuso ampliamente, incluyendo una segunda exposición individual en el MoMA de Nueva York, y dio conferencias durante casi cinco décadas.