Fueron creados por los Mírdain (Altos Herreros Élficos) en el comienzo de la Segunda Edad del Sol.
Estos son los anillos que Sauron más codicia debido a sus altos poderes.
Funcionaban de la misma forma que el Anillo Único, otorgando poder a su portador según su estatus.
A diferencia del Único, que solamente tenía el poder de destruir, los Tres tenían el poder de crear, preservar y curar.
[6] Los anillos, utilizados solo para obtener riqueza, ampliaron las habilidades naturales y el deseo de dominio de su portador, lo que los hizo codiciosos y extremadamente ricos.
Mucho tiempo después de la destrucción de la Montaña Solitaria, Thrór pasó el anillo a su hijo Thráin, quien vivió muchos años como exiliado en su antiguo hogar.
Se sabe que Durin VI tenía su anillo cuando despertó al Balrog.
Después del sitio de Eregion, Sauron obtuvo los Nueve Anillos torturando a Celebrimbor.
Para los hombres, esos efectos podrían ser especiales ya que los anillos les daban una vida más larga de lo habitual.
[8] Sin embargo, en otras referencias, se menciona que Sauron los había tomado.