Amurga

Localizado entre los barrancos de Tirajana y Fataga, es producto del ciclo de formación de la isla denominado post Roque Nublo que comenzó hace 3,2 Ma, y su paisaje se caracteriza por la fuerte erosión.

Amurga destaca por su biodiversidad, quedando representadas las formaciones vegetales canarias del piso basal, el bosque termófilo y el pinar, estos últimos muy escasos por su explotación hasta bien entrado el siglo xix.

Cuenta además con diversas manifestaciones aborígenes, que han sobrevivido gracias a la casi nula presencia humana durante siglos.

[2]​ El término Amurga es de procedencia aborigen, desconociéndose con certeza su significado.

Parece que hasta principios del siglo XIX, el Amurga estaba cubierto en su zona alta por un gran pinar, pero durante dicho siglo desaparecieron por su tala, acompañado por la desaparición casi total del bosque termófilo, ahora siendo ambos un reducto.