Alfonso López de Zúñiga y Mendoza
[3] El rey Felipe IV le da por carta de enero de 1637 escrita en Madrid la enhorabuena por su casamiento.[4] No tuvo sucesión en su matrimonio, por lo que vino a heredarlo su hermano Juan Manuel de Zúñiga Sotomayor y Mendoza.Las contribuciones (donativos voluntarios) para la defensa hechas por el duque Alonso Diego en 1640 llegaron a los 250.000 ducados.[13] El rey Felipe IV informa por cartas (con firmas autógrafas y sellos de placa) escritas en Madrid de octubre a diciembre de 1637 al duque Alonso Diego, su capitán general de Extremadura, sobre diversos aspectos estratégicos relacionados con los disturbios en Portugal.La revuelta se convirtió luego en una guerra contra España, para lograr la separación de Portugal.[25] Se le informa por carta de 18 de mayo de 1641, que en la villa de Trujillo, Cáceres, han sido avisados todos los hijosdalgo para que puedan montar a caballo y formar ejército a sus órdenes.[28] En el Archivo Histórico Nacional se conserva documentación del duque Alonso Diego, relacionada con la guerra de Portugal, referente a los años 1656-1659, entre ellas, ordenanzas e instrucciones del rey Felipe IV, relaciones de los gastos y contribuciones de guerra.[35] Barcelona se rindió el 11 de octubre de 1652 y Cataluña volvió en 1653 a la obediencia del rey.[43] Recibió en 1638 el cuerpo de su hermano menor Francisco Felipe, capitán de caballos fallecido en Flandes, para que dispusiese llevarlo a enterrar a Plasencia, Cáceres.[46] Litigio varios pleitos con su hermano Juan Manuel por derechos y herencia.[47] Sostuvo pleito, iniciado en 1632, sobre los derechos a la sucesión de los llamados cuatro mayorazgos de Modéjar.[56] Escrituras sobre el pago del derecho a servicio de lanzas.[62] A instancias del duque Alonso Diego se realizan en 1648 autos judiciales sobre los supuestos malos tratos, que el juez de apelación de Villanueva de los Castillejos, Huelva, daba a los sacerdotes de la villa.[64] El consejo de Villanueva de los Castillejos, Huelva, le solicita que los redimiese un censo impuesto a su favor, por la mala situación que atravesaban provocada por una epidemia de peste.