Fue en este año que la compañía cambió su nombre a Piper Aircraft Corporation.
[7] En 1946, la compañía abrió una nueva fábrica en Ponca City (Oklahoma), y transfirió la producción del Cub desde Lock Haven.
Ese año, Piper lideró la producción estadounidense de aviones ligeros.
[8][9] El año siguiente, el boom de la aviación general generado por la posguerra terminó.
[12] En 1960, la línea de aviones Piper consistía en una versión de fumigación y otra de dos pasajeros del Super Cub; los Caribbean, Colt y Tri-Pacer; dos versiones del Piper PA-24 Comanche; el Pawnee; y el Apache con una versión más grande desarrollada a partir del mismo, el Piper Aztec.
[13] El año siguiente, el primer prototipo en ser producido en Vero Beach fue el PA-28 Cherokee.
[19] Las instalaciones de Lock Haven casi quedan completamente destruidas en 1972, cuando lluvias torrenciales provocadas por el Huracán Agnes causaron el desbordamiento del río Susquehanna en junio.
[20][21] Gran parte del herramental requerido para la producción de muchos diseños, incluyendo los Aztec, Navajo y Comanche también resultaron destruidos,[cita requerida] y el programa del PA-31T Cheyenne sufrió graves retrasos al dañarse el prototipo, que acababa de recibir la certificación de la FAA.
[22] Las entregas iniciales del Navajo PA-31-350 Chieftain también sufrieron retrasos de varios meses.
Esta división estaba orientada a aerolíneas de alimentación en Estados Unidos incluyendo a Air New Orleans, Desert Sun en Long Beach, Shasta Air y Sun West Airlines, así como a clientes internacionales, como Vickers, para transporte corporativo en el Reino Unido, Avia Services de Camerún y para el distribuidor autorizado de Piper en Colombia, Aero Leaver.
[26] En 1984 Piper cambió de dueños cuando Bangor Punta fue adquirida por Lear Siegler.
[30][31] La producción del emblemático Cheyenne 400 finalizó en febrero de 1993, con tan sólo 43 unidades producidas desde su aparición en el mercado, una década atrás.
[34] El mes siguiente la firma retiró el "New" de su título, quedando nuevamente como Piper Aircraft.
En respuesta a la crisis económica de 2008, la compañía anunció en noviembre de ese año que estaba reduciendo su trabajo semanal para ahorrar dinero y evitar despidos.
La compañía declaró que esto se debía a una medida cautelar.
El portavoz de Piper, Mark Miller, afirmó que "como este año ha sido bueno para Piper, hemos tomado medidas para mantener la salud empresarial de la compañía y hacer frente a cualquier adversidad futura.
"[36] En febrero de 2009, la compañía anunció que estaba despidiendo a 300 empleados sin emitir notificación alguna y que 650 trabajadores remanentes recibirían el pago de semanas no remuneradas en abril y julio para reducir inventarios.
Mark Miller anunció que la compañía lamentaba esta situación de despidos e indicó que los empleados serían recontratados una vez mejorase la situación económica.
Si las condiciones del mercado continúan deteriorándose, va a ser necesario que la compañía tome acciones adicionales".
Al respecto, Geoffrey Berger declaró: "Piper todavía se ve retada por las debilidades del mercado".
Al mismo tiempo, el vicepresidente ejecutivo Randy Groom renunciaba a la compañía y también se anunciaba que el programa del Piper Altaire pasaba a ser revisado.
El Piper Apache fue uno de los primeros aviones asociados con el término "aero taxi", aunque fue sobrepasado en este rol por diseños más rápidos y espaciosos de sus competidores Beechcraft y Cessna.
El director ejecutivo de Piper, Kevin Gould, afirmó que "El PiperSport es un increíble avión que permitiría brindar a nuevos compradores un nivel de entrada más bajo para adquirir un Piper y dirigiría el modo en que estos clientes pudieran dar el paso siguiente hacia aviones más sofisticados y de mayor desempeño de nuestra línea a través del tiempo".