Michael Curtiz

Contribuyó a crear el cine húngaro dirigiendo desde entonces muchas películas, entre ellos uno de los primeros éxitos nacionales, Bánk Bán (1914).

Al estallar la Primera Guerra Mundial, sirvió brevemente en el ejército austrohúngaro como artillero, pero volvió a hacer cine en 1915 y en ese año o los siguientes se casó con la actriz Lucy Doraine, de la que se divorciará en 1923.

Al acabar la guerra, en Hungría empezó una guerra civil en cuyo curso tuvo problemas: el ejército de Miklós Horthy persiguió a judíos, intelectuales y comunistas; además tuvo que expatriarse cuando la industria del cine fue nacionalizada al advenir la efímera (duró algo más de cuatro meses) República Soviética Húngara de 1919.

Para ayudar en la Segunda Guerra Mundial dirigió la película de propaganda Mission to Moscow (1943), encargada por el propio presidente Franklin D. Roosevelt para recabar apoyo en la Unión Soviética.

El caso es que hubo pleitos por medio y su relación con los hermanos Warner se rompió definitivamente en 1954.

Su primera película en esta etapa fue Sinuhé, el egipcio (1954), dirigida para la Fox y basada en la novela de mismo título del finlandés Mika Waltari.

Fue enterrado en el Forest Lawn Memorial Park Cemetery de Glendale, California.

Se ha dicho a menudo que Curtiz era un director sin estilo definido: trabajó todos los géneros, no siempre aportando originalidad.

Dolores Costello y George O'Brien representados en un cartel de la película El arca de Noé (1928).