Vidángoz (ver Vidangos) pertenece a la serie de topónimos navarros que tienen una terminación en -oz.
Este sufijo también habría dado origen a los patronímicos utilizados en las lenguas romances de la península ibérica.
En la zona vasconavarra, Caro Baroja consideraba que los sufijos -oz, -ez e -iz, aplicados a la toponimia indicaban que en la antigüedad el lugar había sido propiedad de la persona cuyo nombre aparecía unido al sufijo: es posible que su origen se pueda remontar desde la Edad Media hasta la época del Imperio romano.
La pronunciación de Vidángoz como Bidankoze se debía a las peculiaridades del desaparecido dialecto roncalés.
Desde el balcón de casa Sanchena se lee el pregón de fiestas y aparece Maruxa en carne y hueso que es acompañada en un alegre pasacalle por todo el pueblo hasta la plaza donde da comienzo el baile.