Después de la Gran Guerra, la nave fue devuelta a la Ward Line, su anterior propietaria.
Durante breve tiempo realizó el servicio transatlántico hacia España y hasta 1939, operado por United States Lines, se ocupó de la ruta Nueva York–Cuba–México.
Tras completar un viaje como transporte del ejército, fue transferido a la armada estadounidense y registrado como USS Orizaba (AP-24).
Completó numerosas travesías transatlánticas, resultó dañado por un ataque aéreo durante la invasión Aliada de Sicilia y viajó en varias ocasiones a Sudamérica.
El transporte también sirvió en el teatro de guerra del Pacífico, donde completó varios viajes transpacíficos, incluido uno a las islas Aleutianas.
En 1947 el veterano barco resultó gravemente dañado por un incendio, pero fue reparado y permaneció en servicio.
El Orizaba intentó embestirlo y lanzó cargas de profundidad, pero no se pudo saber si el ataque tuvo éxito.
[7] Después de que el Orizaba y el Siboney fueran readquiridos por la Ward Line, en 1920 ambos fueron destinados al servicio transatlántico en las rutas Nueva York–Cuba–España.
El Orizaba en concreto hacía escalas en los puertos españoles de La Coruña, Santander y Bilbao.
[9] En 1924 el barco fue sometido a una importante remodelación que, entre otras modificaciones, alargó la longitud de sus chimeneas.
El capitán del Orizaba detuvo inmediatamente el crucero y lanzó cuatro botes salvavidas que buscaron en vano durante cuatro horas, pues no se encontró ni rastro del poeta.
[13] En abril de 1934, la actriz estadounidense Katharine Hepburn navegó en el Orizaba desde Nueva York a Mérida (Yucatán), donde a su llegada solicitó su divorcio del empresario Ludlow «Luddy» Ogden Smith, con el que estaba casada desde diciembre de 1928.
[14] Otros pasajeros notables del Orizaba en la década de 1930 fueron el diplomático ecuatoriano Gonzalo Zaldumbide y el presidente cubano Fulgencio Batista.
El 11 de julio el barco sufrió daños de poca importancia durante un ataque aéreo y por ello al día siguiente se retiró hasta Argelia con algunas bajas y heridos a bordo.
Tras hacer escalas en Samoa, Numea, Brisbane y Milne Bay, regresó a la costa oeste de Estados Unidos en marzo de 1944, aunque muy pronto tuvo que desplazarse hasta el Pacífico central.
Tras pasar por San Francisco, navegó a Nueva Guinea, Filipinas y Ulithi para llevar más tropas y material militar a las fuerzas estadounidenses que se preparaban para la batalla de Okinawa.
[1] Desde Ulithi, el Orizaba navegó al este, atravesó otra vez el Canal de Panamá y fondeó en Tampa, Florida.
El Orizaba fue galardonado con una Estrella de servicio por su labor para la armada durante la Segunda Guerra Mundial.