Tomás José Grigera

El 30 de septiembre de 1777 contrajo matrimonio con Beatriz Margarita Casaballe y Durán (1761-1823), hija del catalán Mariano Gabriel Casadevalle i Grassot Valls y la porteña Ana Xaviera Duran y Salas, con la que tuvo doce hijos: Manuel Antonio (ca 1779-1852),[2]​ José Mariano(†1818),[3]​ Basilia Antonia (1785-1869), Paula (†1823),[4]​ Cipriana (ca 1790-1823), Hipólito (1792-1851), Mariano (†1859), Rufa Rosa (1797-1877), Hilario Mariano, Evaristo (1798-1869), Victorio (1804-1880) y María Inocencia Grijera (1806-1886).El mismo año en que Grigera se afincó, había sido finalmente incorporada a la Real Hacienda con destino a mantener la caballada del Real Ejército, conociéndose también desde entonces como Estancia del Rey.Grigera "ejerció sobre sus vecinos una especie de patriarcado bondadoso y servicial",[6]​ siendo requerido para resolver disputas y por su consejo, tanto en cuestiones de índole política como especialmente agrarias, ya que era considerado un experto en el oficio.Tenía amistad personal con Cornelio Saavedra y cuando se produjo el enfrentamiento entre Saavedra y Mariano Moreno en la Primera Junta, Grigera se adhirió al presidente, no por cuestiones ideológicas, sino por amistad.Eso le permitió extender su influencia en las orillas, los suburbios de la ciudad.Pronto se formó la Sociedad Patriótica que nucleó la oposición a la Junta controlada fundamentalmente por Saavedra, el deán Gregorio Funes y el diputado Manuel Felipe Molina.Saavedra relataría así el interrogatorio: "previo el juramento que se le recibió, le pregunté: ¿Si era verdad que había procedido a citar y reunir los alcaldes de barrio y tenientes de cuartel?¿Quién es ese pueblo que le da a usted tales órdenes sin noticia ni conocimiento del gobierno?Grigera fue interrogado luego por el diputado morenista Hipólito Vieytes, sin salirse de su invocación al mandato del pueblo hasta que a las seis o siete de la mañana se formaron las tropas en la plaza con excepción del Regimiento América y una diputación de oficiales encabezada por Martín Rodríguez y Juan Ramón Balcarce, acompañado por el doctor Joaquín Campana, unos cuarenta hombres entre oficiales y paisanos, hizo liberar a Grigera."[14]​ La otra razón es la apertura de esa otra caja de Pandora, la apelación al bajo pueblo, a la plebe: "suponiendo pueblo a la última plebe del campo, con desdoro del verdadero del vecindario ilustre y sensato de esta ciudad",[15]​ ya que hasta el momento la acción política representativa o revolucionaria había estado limitada a los vecinos principales.Finalmente quedó libre y abandonó definitivamente la política, pero sin perder ni su representatividad entre los quinteros, ni la consideración que eso le granjeaba de parte de las autoridades.Sus injertos fueron célebres: sandías sin semillas, flores originales, especialmente rosas, un durazno que llevaba su nombre, etc. Grigera llevaba anotaciones detalladas sobre sus tareas, las que trasladó al primer tratado de la materia escrito por un argentino, el Manual de Agricultura.Su carátula detallaba que "Contiene un resumen práctico para cada uno de los doce meses del año.En 1831, ya muerto su autor, se publicó una nueva edición, una tercera en 1854 y una cuarta en Rosario en 1856.En efecto, en 1819 parte del fraccionamiento de la estancia de Zamora había sido concedido al general Viamonte y a Felipe Robles, y luego al general Rondeau.Fue inhumado en el primitivo cementerio de Flores, habilitado en 1807 y con frente a la actual calle Rivera Indarte.
Plaza Victorio Grigera, en homenaje al hijo de Tomás, en el centro de Lomas de Zamora .