Tomás Brizuela

Conocido como el “zarco”[1]​ por sus ojos azules,[2]​ desde joven se unió a las fuerzas federales.

Cuando su provincia fue invadida por Lamadrid, después de la derrota federal en Oncativo, fue tomado prisionero por el teniente coronel Melián.

Al ver que dudaba, lo nombraron jefe militar de la Coalición, aunque nadie pensaba ponerse a sus órdenes.

Los oficiales unitarios que llegaron desde Chile (como el coronel Juan Esteban Pedernera, enviado para ser su jefe de Estado Mayor), y los que llegarían más tarde con Lavalle, lo despreciaban por ser alcohólico y jefe de partidas montoneras.

Tomando su papel en serio, intentó convencer al caudillo santiagueño Juan Felipe Ibarra de unírsele, pero este se negó y permaneció fiel a Rosas.